Detectary y tratar lo antes posible las enfermedades de transmisión sexual
Además del VIH hay varias otras enfermedades de transmisión sexual. Algunas de ellas pueden tener graves consecuencias si no son tratadas. Por lo tanto, debes someterte a exámenes médicos regularmente (por ejemplo, cada seis meses). Presta también atención a los cambios físicos como, por ejemplo, secreción inusual de la vagina, picazón o ardor en el área genital, cambios en la piel o dolor.
Si sientes molestias, acude al/a la médico/a lo antes posible: Las enfermedades de transmisión sexual que son tratadas demasiado tarde o no son tratadas en absoluto pueden, por ejemplo, derivar en inflamaciones pélvicas crónicas, infertilidad o cáncer de cuello uterino. Se utiliza un frotis y/o un análisis de orina o de sangre para diagnosticar la enfermedad. Casi todas las enfermedades de transmisión sexual se pueden tratar con eficacia si son detectadas a tiempo.
En la mayoría de los Gesundheitsämtern (Departamentos de Sanidad) podrás obtener asesoramiento de forma anónima (no tienes obligación de dar tu nombre) y ser examinado/a para detectar enfermedades de transmisión sexual. Si no tienes seguro de salud, serás atendido/a allí de forma gratuita. En el caso de los consultorios, debes tener un seguro de enfermedad o bien pagar de tu bolsillo por los servicios médicos.
El riesgo de contagiarse de hepatitis A o B es particularmente alto en el trabajo sexual. Por lo tanto, debes vacunarte contra la hepatitis A y B. Por lo general, la protección vacunal dura por lo menos diez años.
En el Gesundheitsamt (Departamento de Sanidad) o en un consultorio médico podrás obtener asesoramiento al respecto. Si tienes un seguro de enfermedad, la compañía de seguros de enfermedad cubrirá los gastos de vacunación, de lo contrario, deberás pagarlos de tu bolsillo. Las autoridades sanitarias ofrecen vacunas para personas sin seguro de enfermedad de forma gratuita.
Acude anualmente a realizarte los exámenes ginecológicos para la prevención del cáncer. En este estudio se extrae un frotis de células del cuello uterino. A partir de los 30 años de edad también deberás hacerte controles médicos preventivos de cáncer de mama (palpación de mamas y axilas).
Si estás embarazada, deberás hacerte tests periódicos de enfermedades de transmisión sexual, aproximadamente cada seis semanas: la mayoría puede transmitirse al niño durante el embarazo o el parto y perjudicar su salud. También pueden causar un parto prematuro o un aborto espontáneo. Estos riesgos pueden ser sustancialmente reducidos tomando las medidas sanitarias correspondientes.
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